Uno de ellos ha sido la comunión de mi sobri Ana. Pensé, ¿por qué no hacer algo especial para un día tan importante para ella? Así que en mi cabeza empezaron a perfilarse los cakepops que voy a enseñaros.
Bizcocho de vainilla mezclado con buttercream rosa, cobertura de chocolate blanco (la celebración lo merece) y adornos en rosa (el color favorito de Ana), o cobertura en rosa y adornos en tonos rosas y morados.
Tuve que hacer acopio de palitos, bolsitas, lacitos... Todo para que quedaran cucos.
Aquí tenéis una muestra:
A la derecha podéis ver el poliespan con sus hermanitos secando. Unos los decoré con rayitas de candy melts rosas y les puse corazoncitos blancos y rosas, bolitas de azúcar en tonos rosas, ...
Hice unas etiquetas especiales para la ocasión y las atamos con un lacito rosa. Preparé una cestita blanca con un trozo de poliespan cubierto de papel de seda rosa y los fuimos pinchando (digo fuimos porque me ayudó mi madre, que se le da muy bien esto de hacer ramos, ya sea de flores o de cakepops, jejeje).
Así quedó:
Bastante resultón. A la niña le gustó mucho y a los invitados también. Solo decir que sufrí por primera vez los estragos del calor en mis creaciones... La comunión era en Madrid y dos cakepops no llegaron a ser entregados... Menos mal que hice de sobra...
Con ver la sorpresa en la cara de Anita mereció la pena todo el esfuerzo!
hola, Gemma! ya estoy aquí! que cosas más ricas por favor!!!!
ResponderEliminarFelicidades por este trabajo!