Pues decidí ponerlo en práctica ya que las sobris de mis amigas venían a la ciudad. Preparé media docena de cupcakes de vainilla, dos los decoré como el monstruo de las galletas (que sé que les encanta), a dos les puse un copete de buttercream y otros dos los cubrí con fondant blanco.
También les preparé un poquito de glasa para que pudieran pegar los sprinkles y las formitas de fondant variadas a los cupcakes.
Las tías, muy serviciales, le hicieron un book a las niñas para que yo pudiera enseñároslo! Estos son los cupcakes de Carlota y Marta. ¿A que están hechas unas artistas?
Además decoraron unas galletas del Ikea. Estas nuevas generaciones pisan fuerte, nos tomarán el relevo enseguida!!!
Me las como a todas...cupcakes, galletas y a las pequeñas Gil! ;-)
ResponderEliminarChulísima idea, Gemma!
Besines