Muffins de calabacín y beicon

Este mes voy a enseñaros algunas recetas saladas, y es que cuando descubrí que también hay pastelitos salados no pude evitar probar varias recetas. Una es ésta de muffins de calabacín y beicon. Están riquísimos. No es la primera vez que la hago y me he decidido a publicarla para el concurso del mes de agosto de La Cuinera ¡nos vamos de picnic! Porque... ¿acaso no es una estupenda forma de llevar un plato con verduras al campo?

También me parece una forma estupenda de hacer que los más pequeños coman verduras de una forma divertida. Me encantan los pasteles salados, ya sea en forma de quiché, de muffins...

Esta receta la saqué del blog de Tartas y nubes de azúcar. Hice la tercera parte y me salieron 8 muffins, bajitos, que horneé directamente sobre la bandeja de cupcakes. Lo único que no incorporé fue la miel. Os transcribo la receta tal cual la preparé yo (reducida a la tercera parte).

Ingredientes:

100 gr. de harina

100 ml buttermilk (100 ml de leche con una cucharada de zumo de limón, dejar reposar 10 minutos)

1 huevo

30 gr. aceite de oliva suave (no tenía mantequilla y los resultados con aceite me gustan mucho para este tipo de pastelitos) 

1 cucharadita de sal

1 cucharadita de levadura

1/4 cucharadita de bicarbonato sódico

100 gr. de calabacín rallado

30 gr. de beicon

30 gr. de queso (yo usé mozarella rallada)

Preparación:
Batir el aceite y el huevo, incorporar la buttermilk. Mezclar aparte los ingredientes secos (harina, sal, levadura y bicarbonato. Incorporar a la mezcla anterior de dos o tres veces según se vayan incorporando.
Echar el calabacín, el beicon y el queso y mezclar con una espátula.
Repartir en las cápsulas (o el molde de cupcakes), y hornear a 170º unos 20-25 minutos.

A disfrutar de ellos en el campo!